PREMIO “CHUMBO VERDE” a la Consejería de Cultura por su responsabilidad en la nefasta restauración llevada a cabo en el Mausoleo de Abla

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El Mausoleo de Abla es una construcción romana del s II de nuestra era declarado como BIC en 2004. Este monumento ha sido dañado de manera total e irreversible por las distintas fases de una restauración que comenzaron en el 2006.

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En la primera de estas fases y con un presupuesto de 328.017 €, para una construcción de apenas 6 metros cuadrados, se destruyó el primitivo mortero exterior que permitió que en 1983 el historiador Antonio Gil Albarracín lo datara como construcción romana del siglo II.

 

  

Este mortero original ha sido sustituido por una monocapa que simula despiece de cantería, colocándose unas gárgolas-canalón en el arranque de los arcos que le dan un aspecto deplorable

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Las críticas a esta actuación, obligaron a la Consejería de Cultura a deshacer este trabajo, encargando un nueva restauración con un presupuesto de 404.489 euros, encargada ¡al mismo equipo técnico!. Ahora se ha retirado el revestimiento, dejando sólo algunos testigos, para dejar el muro original a la vista,  muro que ha quedado dañado de forma irreversible al haber sido destruida su capa superficial. 

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Consideramos que esta restauración es un despilfarro de dinero público (¡732.506 euros!), cuando tan necesitado está el patrimonio histórico de inversiones, que ha sido utilizado en destruir un BIC que mejor suerte habría corrido quedando en su estado original

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One comment

  • Todavía no se sabe porqué no se dejo como estaba. Aguantó siglos como la ermita de los moros, aguantó siglos como corral, aguantó decenios como criadero de conejos, aguantó el paso del tiempo como un símbolo de nada, era eso ,la ermita de los moros,nadie la destrozó,cosa milagrosa y hasta tuvo su leyenda para los más viejos del lugar (desde ella, en tiempos de los árabes, se «trasmitían» por medio de antorchas las señales para indicar de «algo que pasáse» a los otros pueblos de los alrededores).
    Pero claro, nos llegó la cultura y con ella el PARNÉ y para pasmo de eruditos e historiadores aquello no podía quedar así había que mostrar al «mundo mundial» lo que los «expertos en pelotazos y otros menesteres » eran capaces de hacer.
    Hete aqui que se han cargado un monumento que solo pedía que no se le destruyera en aras del progreso «culto».
    El paso de los siglos le habían dado una patina de «Viejo», pero la estulticia, el afán crematístico, el qué sabrás tú, el tú pide por esa boquita que se hará lo que se pueda, han terminado por destruir lo que gente(en principio catetos e incultos)lograron trasmitir a sus tatarataranietos.
    No sé de quien es las culpa directamente, pero todos debemos sentirnos culpables por no haber corrido a gorrazos al primero que osó poner el primer palustrazo de cemento sobre algo que, durante siglos se conformó con la caricia de la brisa se resistió a las tempestades y doró al sol su epidermis de piedra.
    Un saludo

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